CONCLUSIONES DE LA JORNADA JUBILACIÓN Y PENSIÓN DEL MEDICO
- Son muchos los retos, las dificultades, las exigencias y grande el esfuerzo personal requerido para llegar a ser médico y seguir siendo médico.
- Las condiciones laborales, con unas jornadas muy superiores a las exigidas al resto de los trabajadores, deben ser tenidas en cuenta a la hora de la jubilación y, en todo caso, para el cálculo del periodo de carencia.
- Los médicos tenemos la sensación de que aportamos mucho al sistema y recibimos pocas contraprestaciones. Se nos exige mucho, (en tiempo, de formación, trabajo, dedicación y aportaciones económicas) y, a cambio, recibimos poco y lo percibimos como un escaso reconocimiento a nuestra labor.
- La pérdida de poder adquisitivo que sufre el médico tras su jubilación es muy superior al que sufren el resto de los trabajadores y no guarda relación con las aportaciones realizadas, es preciso, sin cuestionar el principio de solidaridad social, corregir el exagerado desequilibrio que soporta el médico.
- Es necesario y urgente establecer un régimen flexible de jubilación, de carácter voluntario, solo condicionado por las condiciones físicas o psíquicas del médico, entre los 60 y 70 años de edad.
- Hay que introducir, con carácter urgente, criterios de flexibilidad que faciliten la adaptación del paso de la vida profesional activa a la situación de jubilación, estableciendo mecanismos que permitan la compatibilidad entre el cobro de la pensión y el trabajo a tiempo parcial.
- Existen sobradas razones para saber que el actual sistema de trabajo al que estamos sometidos los médicos resulta perjudicial para nuestra salud y que esto, a su vez, repercute negativamente en la calidad del servicio que prestamos al ciudadano y en la propia eficiencia del sistema.
- Los médicos hemos dado muestras de gran generosidad y solidaridad con la sociedad, desde que elegimos esta profesión y continuamos haciéndolo a lo largo de toda nuestra vida profesional, confiamos que la sociedad sepa reconocerlo y adoptar las medidas necesarias para ello.
- Es difícil mantener indefinidamente un esfuerzo titánico al servicio de la sociedad y que no sea reconocido por ésta.10. Resulta imprescindible que la Sociedad y los Poderes Públicos asuman su responsabilidad y, todos juntos, tomemos conciencia de la necesidad de CUIDAR AL CUIDADOR.